jueves, 9 de febrero de 2012

Ajo

Las  raíces cortas del ajo lo hacen ideal para maceteros y huertos urbanos,
en este caso se ocupo  un cajón de tomates.


Su nombre científico es Allium sativum y pertenece a la familia Liliáceas. Se origino en Asia, su uso se extendió a Egipto, Roma  y el resto de Europa, fue traída por los españoles al continente americano.
El ajo esta formado en su base por un bulbo denominado cabeza  que en su interior se divide en los llamados dientes, la cantidad de dientes depende de la variedad y condiciones climáticas, sus raíces son cortas, lo que es ideal para cultivar en jardineras o maceteros.
El ajo alcanza los 30 a 40 centímetros de altura  y sus ramas son macizas a diferencia de las cebollas

      
Una jardinera o un cajon de manzanas se pueden ocupar para cultivar ajos, es una solucion ideal si no se dispone de mucho espacio.


Siembra:
Loa ajos se pueden plantar  a fines del verano o al principio del otoño
Se entierran los dientes de ajo en forma vertical con la punta hacia arriba, separados 10 a 8 centímetros entre ellos y se les cubre con una delgada capa de tierra.
Desde la siembra hasta la recolección transcurren aproximadamente 6 meses.

    

Cosecha:
Los ajos están listos aproximadamente 6 meses despues de que se sembraron los dientes y cuando las hojas de la planta empiezan a decaer y secarse, como se puede ver en las dos fotos de abajo.





Cualidades medicinales del ajo:
El ajo es muy rico en sales minerales, azufre, encimas y vitaminas, ayuda en la reducción del colesterol, tiene  efecto antihipertensivo, ayuda en la prevención del cáncer de estómago, aumenta  la capacidad del sistema inmunológico y tiene un efecto antibiótico.




       
Composición química del ajo:
 Agua 70%
 Hidratos de carbono 23% (fibra 1%)
 Proteínas 5%
 Lípidos 0, 3%
 Potasio 400 mg/100 g
 Sodio 30 mg/100 g
 Fósforo 140 mg/100 g
 Calcio 14 mg/100 g
 Hierro 1, 5 mg/100 g





0 comentarios:

Publicar un comentario